Manual para vivir bien: La armadura del cristiano

VESTÍOS DE TODA LA ARMADURA DE DIOS
¿Cuál es el arma más poderosa del diablo? Se puede afirmar que varias de sus armas son poderosas y lo son, sin embargo, ningún arma se puede comparar con el poder del engaño.
De igual manera, las formas de sus ataques son diversos. Pocas veces son ataques frontales, su estrategia se basa en presentar sus ataques como circunstancias adversas, problemas, mala suerte, etc. Sin embargo, detrás de esas supuestas circunstancias esta la operación del maligno buscando dañar de una u otra manera la paz y el gozo del creyente.
Ante la realidad de los ataques, cada creyente debe estar vestido de toda la armadura de Dios. Y esta está diseñada para la victoria segura.

PASO PREVIO:
1. Estar firmes:
a. Preparados de antemano para la batalla. La batalla no avisa cuando llega. Solamente llega y se debe estar preparados para cualquier contingencia que se presente.
b. Preparados para lo que venga. Cuando la batalla llega, el creyente no debe estar desprevenido. El ataque puede venir de donde menos se espera y de quienes ni siquiera se piensa.
c. Preparados para la victoria. El creyente no sale a la batalla a intentar derrotar al enemigo. Todo creyente es mas que vencedor, no es sus propias fuerzas o estrategias, sino en las del Señor Jesús. Rom 8:37
2. El ataque de Satanás: Satanás ha de usar la misma táctica que uso en el huerto del Edén[1], aparte de otras que con los siglos ha ido perfeccionando, siempre con el mismo propósito que es alejar el corazón del hombre del único que le puede dar satisfacción y vida.:
a. Cuestionar la veracidad de Dios. “Con que Dios os ha dicho” Gen 3:1. ¿Por qué dirigió su ataque contra la veracidad de Dios? Porque el ser humano, por creación y naturaleza, necesita confiar en alguien
b. Cuestionar la voluntad de Dios. “No comáis del fruto…” ¡Por que ataca de esta manera? Porque solo existen dos maneras de hacer las cosas: A la manera de Dios o a la manera del Diablo.
c. Cuestiona la motivación de Dios. “Sabe Dios que el…” ¿Por qué? Para señalar que Dios no es digno de confianza, que tiene motivos escondidos en lo que El ordena.
d. Problemas que lo llevan a renegar de la fe y obediencia. Lo ha hecho a través de la persecución. La descarada que se ha dado a través de los siglos. Y la de la presión del grupo donde se desarrolla la vida del creyente.
e. Problemas de orden doctrinal. Existe más falsificaciones de lo que uno se pueda imaginar. ¿Cuál es el propósito de la falsificación? Presentar lo falso como verdadero, alejando del disfrute de lo real y verdadero.
f. Problemas de prioridades. Cuando hace creer que existe cosas más importantes que lo que hacemos para Dios, llevando a la idolatría.
g. Problemas de unidad. ¿Por qué? Porque el poder de la unidad trae de por si vida y bendición y es una de los modos más eficaces de testificar del evangelio Jn 17:11, 21-23.
h. Problemas de autoconfianza. ¿Por qué? Porque quien confía en si mismo no admitirá sus errores y acaparara el éxito como virtud propia. Esto aleja del que hace que las cosas sucedan, esto es, Dios.
i. Problemas de sinceridad. ¿Por qué? Porque la hipocresía es la forma de aparentar lo que no se es. Y es algo que Dios detesta por naturaleza.
j. Problemas con la autoridad. ¿Por qué? Porque todo el universo se mueve en base del principio de autoridad.
3. “Ceñidos vuestros lomos[2]”. Con esta declaración Pablo introduce una figura que era común para su época. Tenía un sentido de urgencia, de estar preparados para un gran acontecimiento. Dos ejemplos ilustran esta verdad.
a. Cuando Israel estuvo para salir de Egipto, en lo que se consideró como la última plaga, Dios instruyó a Moisés con respecto a la pascua, diciéndole: “Y lo comeréis así: ceñidos vuestros lomos, vuestro calzado en vuestros pies, y vuestro bordón en vuestra mano; y lo comeréis apresuradamente; es la pascua de Jehová” (Exo 12:11).
b. Cuando el Señor habló de su segunda venida utilizó la misma figura: “Estén ceñidos vuestros lomos y encendidas vuestras lámparas” (Luc 12:35). La idea es la importancia de estar preparados
4. La verdad. La Palabra de Dios es el fundamento de la vida de todo creyente.
a. Leerla de modo consistente. La Palabra de Dios es considerada como pan, por lo tanto, es el alimento básico de la vida del creyente.
b. Meditarla. Es ocupar la mente en lo que se lee cada día, buscando la aplicación práctica para la vida personal.
c. Obedecerla. Esta es la parte vital de la verdad. Si no existe obediencia, solo existe conocimiento pero no sabiduría.
5. La función del cinturón. El cinturón romano tenía una función especial. Por un lado mantenía unidas todas las partes de la armadura. Sin el cinturón puesto, todo se caía. El “cinturón de la verdad”, porque la verdad bíblica conecta todas las partes en la vida del creyente. Pero el cinturón permitía que el soldado se moviera de una manera libre y no se enredara con su túnica. Además, el cinturón servía para enganchar la espada y en casos el escudo.
a. Un combate inminente. Un cinturón ajustado representa la realidad de un combate. Cuando el soldado romano se abrochaba el cinturón sabía que estaba entrando en acción.
6. Usando la verdad. La primera pieza de la armadura es para enfrentar la táctica de Satanás es el engaño.
a. El cinturón de la verdad se expresa a través de la integridad. Nada convence más que la verdad. Y esta se manifiesta por medio de la integridad. Cuando esgrimimos la integridad, asestamos una derrota al enemigo. Porque de nada sirve los demás si no hay integridad en lo que somos y hacemos. La integridad amarra el resto del equipaje. Satanás no podrá contra un cristiano íntegro.
b. Amar la verdad en lo íntimo. David fue un hombre conforme al corazón de Dios. Sin embargo, él sabía que su corazón falló. Fue seducido por el pecado y cedió a las pretensiones externas. Cuando su corazón le falló, escribió: “He aquí, tú amas la verdad en lo íntimo…” Sal 51:6

PROTEGIÉNDONOS CON LA CORAZA[3]
1. ¿QUÉ ES LA CORAZA DE JUSTICIA?
a. Armadura compuesta de peto y espaldar: las primeras corazas eran de cuero, piel o madera. Justicia, f. Virtud que inclina a cada uno a dar lo que le pertenece o lo que le corresponde. Lo que debe hacerse según el derecho o la razón[4].
b. Era llamada “tórax” y era como hoy día es el chaleco antibalas. Era la primera cosa que aseguraba el cinturón.
c. ¿CON QUÉ PARTE DEL CUERPO TIENE RELACIÓN? Con el pecho, y se relaciona con dos órganos vitales: el corazón, y las entrañas (el centro de las emociones).
d. ¿PARA QUÉ SIRVE? Para proteger nuestro corazón, ya que es el lugar de donde salen los pecados; y las entrañas que son el asiento u origen de nuestras emociones, las cuales son volubles (inconstantes), y por lo tanto vulnerables.
2. ¿Qué justicia se refiere?
a. No es la justicia propia. El objetivo de Satanás es impedir a los hombres que reconozcan el señorío de Jesús. Para lograrlo, una de las cosas que hace es hacer creer que se puede alcanzar la salvación a través de su esfuerzo. Que a través de sus buenas obras ya tiene un lugar en el cielo. El fariseo se creyó la persona buena, cuando se comparo con el publicano. Le daba gracias a Dios, no porque fuese salvo, sino porque no era como las demás personas: ladrones, adúlteros, injustos. ¿Qué hacía el publicano? Ni siquiera alzaba su mirada. Lo que pedía era que el Señor fuera propicio a su alma. Se ha dicho que el infierno se está poblando de mucha “gente buena”.
b. Comienza con la justicia imputada. Dios a través de Jesucristo ha justificado de los pecados. Es la justicia que ha hecho posible el perdón de los pecados Rom 3:21ss. Es Dios que ha cubierto con ella, al decirnos: “Al que no conoció pecado por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuéramos hecho justicia de Dios en él” 2 Cor 5:21. Esta es la justicia con la que quedamos libres de la condenación de la ley. Con ella podemos disfrutar de todos los privilegios de hijo de Dios.
c. Tiene que ver con la justicia práctica. Fil 3:12-14; Rom 6:12-13 La justicia que tiene que ver con la aplicación de la palabra en todas las áreas de nuestras vidas. Tiene que ver con el deseo de corresponder a esa justicia imputada. La justicia práctica es la coraza que protege nuestra vida. Es aquella vida que se concentra en buscar la excelencia; que lucha todos los días para poner el cuerpo en servidumbre con el propósito de dejar que el hombre interior se renueve en su santidad. En la guerra espiritual, el énfasis radica en una confrontación con demonios que en el vivir una vida de santidad. El tema se concentra más el ejercicio de la autoridad para reprender o declarar, que el cuidado de la relación con Dios. Necesitamos proteger nuestros pensamientos y emociones.
3. ¿CÓMO PODEMOS PONERNOS LA CORAZA DE JUSTICIA EN LA VIDA DIARIA?
a. Recibiendo de Dios un corazón nuevo, Eze 36:26
b. Dejando que Cristo habite por la fe en mi corazón, Efe 3: 17-19
c. Guardando la Palabra en mi corazón, Sal 119:11
d. Dejando que Dios examine y conozca mi corazón, Sal 139:23
e. Hablando cosas rectas, Prov 23:16
f. Usando el dominio propio que Dios ya me dio, 2 Tim 1:7
[1] Jhon MacArthur Efesios Pag. 415-419
[2] Rev. Julio Ruiz, Mensaje sobre la Guerra Espiritual Un enfoque balanceado La Armadura para el Combate
[3] Armando Montejo Olvera hizo estudios en el Seminario Bíblico de Puebla, ubicado en Puebla, Mexico.
[4] Tomado de WordReference.com

Efesios: Manual para vivir bien. La batalla espiritual

MANUAL DE GUERRA ESPIRITUAL
Introducción. El ministerio de Jesús comenzó con un enfrentamiento con el diablo y término con otro enfrentamiento, lo que nos enseña que desde que comenzamos nuestra vida cristianan hasta nuestro último día, estamos enfrascados en una batalla espiritual.

ALGUNOS PRINCIPIOS ESPIRITUALES[1].
· La batalla espiritual crece en la medida de nuestra obediencia.
· El que no tiene luchas espirituales ha caído en pecado o es complaciente con el mismo.
· Donde existen mayores oportunidades de crecimiento es donde habrá mayor enfrentamiento.
· Un ministerio fácil es un ministerio débil.
· Un creyente que no está preparado es un creyente derrotado.

LA UNIVERSALIDAD DE LO DEMONÍACO
· Desde la antigüedad, cada cultura ha tenido una tradición oral o escrita que indicaba un conocimiento de las realidades espirituales[2].
· Casi todos informan tener un conocimiento desde mucho tiempo atrás del Dios Supremo que su pueblo solía conocer pero no conoce ahora[3] y todos informan tener un conocimiento de dioses malévolos que atormentan, que deben ser aplacados y que otorgan poderes a cambio de la veneración.
· Las diversas culturas reconocen la presencia de espíritus de sus ancestros[4]. El temor del mundo espiritual, junto con el deseo de controlar esas fuerzas para beneficio propio, existe hoy en todo país pagano, además de los que tienen un "cristianismo" externo pero raíces históricas en el ocultismo.
· En Francia se estima que se gastan uno doscientos millones de dólares al año en brujos, hechiceros, adivinos, pociones de amor, etc.[5].

NUESTRA GUERRA[6]:
• 2Tim 2.3 Cada cristiano es un soldado (si le guste o no, así es la realidad).
• 2Tim 2.4; 4.7 La misión de cada cristiano es la misma: Pelear la buena batalla.
• 2Tim 4.10 La desgracia de muchos cristianos: Son desertores (soldados que ha desamparado su bandera).
• La razón por la cual la han desamparado: Se debe a la comodidad. “ no me moleste. Estoy cómodo aquí como estoy.”
• OJO: La Biblia dice que un cristiano debería recordarle a uno de un soldado de la infantería. ¡Pablo era así! ¿A cuántos cristianos conoce que son: rudos, duros, fuertes y (v13) comprometidos con la Misión como soldados?
• Hoy día, el cristiano promedio es consentido, débil, flojo, delicado, suave, fuera de forma espiritualmente y sumamente preocupado con su propia comodidad.
• Piense en la película “El Gladiador”. ¿Cuál de los 2 protagonistas quisiera ser? ¿Cómodus, el débil que no tiene carácter ni coraje? O, ¿Máximo, el valiente y fuerte?
1. Por lo demás,
a. Pablo comienza la narración de la guerra cristiana: “Por lo demás [“Por último”[7]]( la palabra griega puede ser traducida mejor con la frase: De aquí en adelante), hermanos míos” Efe. 6:10.
b. La expresión plantea un punto sólido. Hasta aquí, Pablo ha bosquejado cómo Dios nos redimió del pecado mediante Cristo, nos selló con su Espíritu, nos trajo a la comunión de la unidad y nos convirtió en una familia para Dios. Como miembros de esta familia, Dios espera que andemos “como es digno de la vocación [de él]” Efe. 4:1, al poner a un lado la vieja vida pecaminosa, vistiéndonos del nuevo ser transformado, andando en pureza, en amor, en luz, en sabiduría y en una piadosa relación con todos. La vida y el andar cristianos debieran estar “llenos del Espíritu Santo”. Efe. 5:18
c. Se puede parafrasear “Después de tener en cuenta lo que hemos aprendido, queda pendiente que sepan como tomar toda la energía de Dios para la guerra feroz que tienen que afrontar[8]”
2. Hermanos míos, esta enseñanza está dirigida de modo especial y único a los creyentes. ¿Por qué? Porque son parte del ejercito del maligno.
PRIMERA TAREA: PREPARASE ANTES DE LA BATALLA.
a. Fortaleceos en el Señor: La expresión fortaleceos o esforzaos, significa el llamado de Dios a afrontar sin temor al enemigo, ya sea en conflictos espirituales o físicos. El llamado sugiere que Dios está diciendo: Tu fuerza proviene de mí. Por lo tanto, sé fuerte y no tengas miedo. Jos 10:25; Isa. 35:4; Dan 10:19; 1 Cor16:13. ¿Cómo?
i. Literalmente esta palabra significa asirse, tomarse con fuerza de algo o alguien. En este caso del Señor, lo que enseña que la vida del creyente está en la mano de Dios.
ii. Jesús es la fuente de poder y autoridad. Y el camino para disfrutar de su poder es la santidad. Mat 28:18; Fil 2:8-11
iii. Usar los medios de gracia. La oración, devocional diario, ayuno etc.
iv. Entender el principio de autoridad. Nadie podrá enfrentarse al adversario si es que no está bajo autoridad y se somete y honra a dicha autoridad.
b. Y en poder de su fuerza. La clave de la victoria no radica en el creyente sino en poder ilimitado de Dios. Zac 4:6; 2 Cor 3:5

SEGUNDA TAREA: VESTIRSE DE LA ARMADURA DE DIOS.
3. La provisión divina para todo creyente: Vestíos de toda la armadura de Dios, Todo cristiano es un guerrero. En el mundo natural ser soldado es una de los trabajos más complicados, porque vive preparándose para luchar en cualquier momento.
a. Vestirse: Se refiere a una acción realizada una vez y para siempre, cuyos efectos son permanentes. Implica que el vestirse no es un asunto de cada dia, sino cuyo resultado es permanente.
b. Toda: La armadura no es algo opcional, cada una de sus partes es esencial para lograr el éxito en la batalla.
c. Armadura: Panoplia es una transcripción de la palabra griega. 22, Era la totalidad de una pesada armadura de soldado armado[9].
d. De Dios: Es decir, la armadura provista por Dios; no la nuestra, pues la nuestra no aguantaría Sal 35:1-3. Es espiritual, pues, y poderosa, porque es de Dios, no carnal 2Cor 10:4.
4. Para que podáis estar firmes contra las asechanzas del diablo. Aun cuando Cristo ha derrotado a Satanás en la Cruz y nos brinda esa victoria cuando lo aceptamos por fe como Señor, nuestra vida nueva no transcurre sin peligros. Como señala Herman Ridderbos, un teólogo del Nuevo Testamento: El poder satánico, “aunque ya haya sido derrotado en Cristo, no ha llegado a ser todavía inofensivo. Pero, con el fin de que seamos capaces de contender contra él en forma adecuada, la iglesia ha recibido una armadura de Dios, tan ricamente constituida que es capaz de seguir estando firme[10]”.
a. Para: indica propósito, meta. Por lo tanto, el vestirse de la armadura de dios no es un asunto de que se hace porque es un adorno, sino porque es es un elemento vital en la vida del creyente.
b. Estar firmes: La responsabilidad es no ceder un solo ápice del territorio que nos corresponde por derecho.
c. Las asechanzas del diablo. La palabra asechanzas es un término que se traduce como métodos, modos, maneras. Se usaba para referirse a los modos en que un animal salvaje asechaba a su presa y se lanzaba sobre ella para matarla. El termino señala que el arma más poderosa del diablo es el engaño. Jn 8:44
d. Del diablo. Una de las estrategias del diablo son la de hacer creer que no existe y la otra es la sobre-enfatizar su realidad.
i. La palabra diablo significa calumniador. atribuir falsa y maliciosamente a alguno palabras, actos o intenciones deshonrosas
ii. El Antiguo Testamento: Zac 3.1-4 Satanás estaba listo para acusar al sacerdote. La única defensa que uno tiene contra sus acusaciones es la obra de Dios y Su justicia
iii. El Nuevo Testamento: Apoc 12.10 se ve que Satanás es “el acusador de nuestros hermanos, el que los acusaba delante de nuestro Dios día y noche”.
e. ¿Qué áreas ataca el diablo?
i. En la relación del hombre con Dios. Creando religiones que reemplacen la adoración al único Dios verdadero.
ii. En la relaciones interpersonales. La familia.
iii. En el área personal, como la sexualidad.
iv. En el área espiritual, como presentar la mentira como verdad, la religiosidad,
5. La batalla contra los demonios[11]:
a. Porque no tenemos lucha contra sangre y carne, la batalla del creyente no se da en los niveles humanos, sino que detrás de los conflictos que se originan de estas batallas están operando las fuerzas malignas que tienen el propósito de hacer que el creyente pierda su posición de seguridad de fe.
b. Lucha: Se refiere a la lucha mano a mano, la lucha libre. La característica principal de este tipo de lucha era que la norma es que no habían normas. Y que era un combate a vida o muerte.
c. Sino contra principados, contra potestades, contra gobernadores de las tinieblas de este siglo, contra huestes espirituales de maldad en las regiones celestes. Se muestra los diferentes niveles de autoridad que existe en el mundo demoniaco y que estas actúan de acuerdo al principio de autoridad.
i. Principados: Estos demonios son como príncipes en el sentido de que controlan una región, un grupo étnico de personas; controlan naciones. Cada nación, parece, tiene su principado, su demonio principal que coordina toda la guerra espiritual en su región, en su territorio. Es jefe sobre ese lugar. Dan 10
ii. Potestades: Las potestades en la jerarquía satánica son como los “magistrados” que tiene poder sobre una provincia de una nación, como las “autoridades” de Romanos 13
iii. Gobernadores de las tinieblas: Los demonios encargados de ciertos individuos o de ciertos grupos de individuos en la jurisdicción de los potestades.
1. “Gobernador”: el que gobierna con despotismo, violencia y por la violencia; la persona que desempeña el mando de un territorio.
2. De las tinieblas: Ámbito donde los demonios operan. Se refiere a las vidas de las personas no creyentes, quienes se convierte, de modo consciente o no, en instrumentos del diablo.
iv. Huestes espirituales de maldad en las regiones celestes: Se refiere a la multitud de espíritus malignos que operan en todas las esferas de la actividad humana. Apoc 12:9-12. Esto significa que existen millones de servidores satánicos. "Sabiendo que tiene poco tiempo" Por eso incrementa su plan.
1. Huestes: ejercito en campaña. Conjunto de seguidores de algo o alguien.
2. Espirituales. Se refiere a su naturaleza y el campo de acción.
3. Maldad. Señala el carácter de toda su obra.
4. En las regiones celestes. Es el territorio donde se encuentran y desde donde operan sobre la humanidad y de modo especial, sobre los creyentes.
6. La clave de la victoria espiritual es estar firmes:
a. Primer paso: Por lo tanto, tomad toda la armadura de Dios, No es un asunto opcional, es una necesidad de todo creyente. A la vez es la responsabilidad que otorga el ser hijo de dios, cuya gran tarea es ser guarda de los que ama-.
b. Segundo paso: Para que podáis resistir en el día malo. El día de los ataques especiales de Satanás (vv. 12, 16) en la vida y en la hora de la muerte (Apoc 3.10 Tenemos que tener siempre puesta la armadura, para estar listos para el día malo, que puede venir en cualquier momento, ya que la guerra es constante[12]
c. Tercer paso: y habiendo acabado todo, Habiendo cumplido todo lo que como creyente le corresponde hacer. La tarea no termina hasta que termina.
d. Cuarto paso: estar firmes. La clave es seguir firmes después de cualquier ataque del maligno.
[1] Jhon MacArthur Efesios Pag. 397-398
[2] Unger, Demons in the World Today, p. 10
[3] Neil, A History of Christian Missions, p. 1
[4] Koch, Demonology Past and Present, p. 24, 25
[5] Davis, Contemporary Counterfeits, p. 33
[6] Libro de Efesios Por Gregory Alan Kedrovsky B.S.B.A, M.A. Pastor fundador de La Iglesia del Este
[7] NVI
[8] Comentario Bíblico Nuevo Continente Efesios. Raul Caballero Yoccou Pag. 233
[9] VINCENT'S WORD ESTUDIOS - EPHESIANS 6
[10] Herman Ridderbos, Paul: An Outline of His Theology, p. 392
[11] La versión de Williams traduce Efe 6: 12 así: “Porque nuestra lucha, no es contra enemigos meramente humanos; Sino contra gobernadores, autoridades y poderes cósmicos de este mundo en tinieblas. Es decir las fuerzas espirituales de maldad que nos desafían en una competencia celestial”.
[12] Comentario Bíblico Jamieson, Fausset, _Brown

Manual para vivir bien: Relaciones laborales

LA RELACIÓN CON LOS EMPLEADOR.
Principio general: Someterse unos a otros.
Aplicación: Someterse es reconocer las necesidades del otro y suplirlas.
¿Cuál es la razón de los múltiples conflictos laborales? Se pueden presentar diversas opiniones, algunas de ellas validas. Sin embargo, el fondo del asunto es la avaricia, todos quieren mas, muchas veces con el menor esfuerzo, sin tener que dar más de lo que se da, basado en el profundo egoísmo donde se busca solo la satisfacción personal.
1. Principio general: Obedecer a los patronos.
a. En contexto social. En la cultura de aquellos tiempos, la esclavitud era común, en la mayoría de veces, estos no tenían derechos y eran tratados como si fueren bienes con los cuales se podía negociar como un mueble o una cosa. Era común afirmar que los esclavos eran herramientas de trabajo que hablaban, comparándolos con los animales que no hablaban.
b. Aplicación actual. Aunque la esclavitud como sistema no existe en gran parte del mudo, el abuso y la explotación sigue expresando en diversas maneras. Por lo tanto, es necesario que los que trabajan para otros tengan en claro los principios divinos en su actitud y reacción en sus centros de trabajo.
c. Obedecer. Es la actitud que se tiene ante el que es patrón o a quien se le ha dado la autoridad para ejercerla en un centro de trabajo.
2. La actitud correcta:
a. Con temor: Honor. Esta actitud no tiene que ver con el terror, miedo.
b. Con temblor: Respeto. El que detenta la autoridad le ha sido asignada por Dios, por lo tanto, el respecto, actitud del corazón, no se da por la buena conducta dl empleador, sino a pesar de que no la tenga.
c. Sencillez de corazón: No es la sumisión formal, hipócrita. Es una actitud sincera, sin una motivación extraña.
d. Como a Cristo: Tit 2:9-10 enseña que cuando se sirve de una actitud correcta es un adorno a la doctrina de Cristo, es decir que la actitud correcta es la mejor manera de presentar el evangelio de Jesús. Todo lo que hacemos, aun lo mas insignificante debe ser hecho para el Señor, lo que lleva a que la excelencia sea una norma en la vida de todo trabajador. Los resultados en si son de valor relativo, comparado con la aceptación de parte de Jesús. 1 Cor 10:30
e. No sirviendo al ojo, solo para agradar a los hombres: La mayor ambición del creyente es la de agradar al Señor Jesús, no existe mayor razón para hacer todo lo que se hace que no sea la que el Señor Jesús sea glorificado por la conducta del creyente, en este caso, en el centro de su trabajo.
f. Sirviendo como siervos de Cristo, de corazón, haciendo la voluntad de Dios: la actitud del trabajador determina la calidad del trabajo que realiza. A su vez determina el criterio que califica el empleador.
g. Sirviendo de buena voluntad:
h. Sirviendo al Señor y no a los hombres: Ecle 9:10: “Todo lo que viniere a tu mano hacer hazlo según tus fuerzas. Col 3:23 Todo lo que hagáis, hacedlo como para el Señor y no para los hombres”
3. La recompensa:
a. No es el asunto monetario: El dinero es importante pero para el cristiano, la actitud que desarrolla como trabajador no está centrada en la ganancia económica, sino el el agradar a Dios.
b. El bien que cada uno hace eso recibirá del Señor: Dios es mejor pagador que cualquier empleador humano y la paga a quienes desarrollan su trabajo con la actitud correcta.
4. Aspectos prácticos.
a. ¿Puedo permitir el abuso de parte de los empleadores? No, el respeto a los empleadores no da libertad a que estos abusen.
b. ¿Puedo acudir a los tribunales por mis derechos? Claro que si. Las leyes han sido puestas para defender al trabajador a quienes se les comete cualquier tipo de abuso.
c. ¿Qué hacer si la paga no corresponde al esfuerzo que realizo? Hacer el trabajo como si le pagaran más de lo que mereciera.
d. ¿Puedo renunciar al trabajo? Si y solo si se tiene la seguridad de otro trabajo que sea la fuente de provisión cotidiana.

LA RELACIÓN CON LOS EMPLEADORES.
Principio general: Someterse unos a otros.
Aplicación: Someterse es reconocer las necesidades del otro y suplirlas.
1. El principio. Hacer los mismo:
a. Lo mismo que se pide a los trabajadores, hacer todo para la gloria de Dios.
b. Implica que el empleador debe ejercer su autoridad como al Señor, es decir, que no puede usar su autoridad para abusar de la misma o usarla de una manera inapropiada.
2. La actitud negativa, dejar las amenazas:
a. ¿Por qué se amenaza? Para lograr que se obedezca. Lo que indica que está usando mal su autoridad.
b. No usar indebidamente la autoridad, no abusa de la misma, no alardea del poder que tiene
c. Quien usa la autoridad de una manera adecuada no necesita amenazar, porque los trabajadores reconocerán el valor de la autoridad
3. La razón:
a. La presencia de Dios: Una razón para actuar de modo correcto es la conciencia de que Dios está al lado de cada uno de nosotros. Si estuvieras más conscientes de esta verdad, no haríamos muchas cosas de las cuales no avergonzaríamos el hecho de saber que El está allí.
b. Que Dios no hace acepción de personas. Dios considera a todos los seres humanos por igual, el no actúa con favoritismo. Hech 10:34; Rom 2:11; Sant 2:9

Efesios manual para vivir bien: La relacion familiar

LA SITUACIÓN DE LA FAMILIA.
La situación de la humanidad se debe a varios factores:
· La naturaleza perdida del hombre:
· El sistema satánico, que es la búsqueda de lo mejor para las persona sin considerar a los demás.
· La filosofía humanista, que se traduce en el principio satánico: “Tu valor está determinado por lo que tienes”

LA RELACIÓN CON LOS PADRES.
Principio general: Someterse unos a otros.
Aplicación: Someterse es reconocer las necesidades del otro y suplirlas.
1. ¿A quienes se dirige el mandato? A los hijos, término que abarca a todos los hijos sin distinción de ningún tipo.
a. A los menores de edad.
b. A los que son mayores y viven en la casa, sean dependientes o no.
c. A los que ya no viven en la casa paterna.
2. Primer principio: Obedecer en el Señor a los padres. Este tiene que ver con la que es visible, con las acciones a la vista de todos.
a. Obedecer significa ponerse debajo de, lo que implica la disposición de reconocer la autoridad del que habla y la disposición de obedecer.
b. En el Señor indica que
i. La obediencia es debida en todo aquello que no transgreda los principios divinos.
ii. Es una obediencia como se da al Señor
c. ¿Alguna excepción? Si, cuando los padres piden a sus hijos el hacer lo que es malo y pecaminoso. Hech 4:19-20
3. Segundo principio: Honrar al padre y a la madre: Este tiene que ver con la que es invisible, con las actitudes del corazón.
a. ¿Qué es honrar? Es tener en gran estiva, valorar con el máximo respeto. Es el mismo término que se usa para mostrar el respeto, estimación y honor que se da a Dios.
b. Es el primer mandamiento que se relaciones a las relaciones humanas, enseñando que la familia es el primer lugar donde se debe mostrar el principio de respeto.
c. Se da igual respeto y honor a ambos, tanto al padre como a la madre, tanto que existía el mandato de muerte a quien dañara a sus padres Exo 21:15; Lev 19209.
4. ¿Por qué? Porque para Dios, ambos son responsables de los hijos, ambos están en el mismo nivel de honra.
a. Porque esto es justo.
i. Lo justo está determinado por quien tiene las normas absolutas: Dios.
ii. Se refiere a todo lo que es correcto
b. Porque es un mandamiento: Esta sería una sola y única razón para honrar, pero la bondad de dios ha añadido a este mandato, la promesa de bendiciones que aseguran el futuro.
c. Porque es un mandamiento con promesa:
i. Para que te vaya bien: Se refiere a la calidad de vida y se refiere a todas las bendiciones espirituales, emocionales, físicas. Implica que el éxito es parte del resultado de la honra a los padres.
ii. Para ser de larga vida sobre la tierra: Cada uno tiene un día señalado por Dios para partir de este mundo. La actitud para con los padres determina que esa hora se acorte o se alargue.
d. Porque agrada a Dios Col 3:20
5. La tristeza de un hijo que no honra a su padre: Prov. 10:1; 17:21; 19:13, 26; 28:24
a. Un problema presente: Se enfatiza en los derechos de los niños, lo cual está bien y es necesario frente al abuso que se da en muchos casos y esferas.
b. Sin embargo es indispensable balancear el concepto enseñando los deberes de los hijos.
c. La pérdida del balance perjudica a todos: A los que están en cualquier lado de la balanza.

LA RELACIÓN CON LOS HIJOS.
Principio general: Someterse unos a otros.
Aplicación: Someterse es reconocer las necesidades del otro y suplirlas.
1. Los hijos son bendición de Dios. Gen 4:1, 25; Sal 127:3-5
2. El mandato es a los padres, incluye a los dos, padre y madre. Desde ya se nota lo impactante de la enseñanza entendiendo los tiempos en que Pablo vivía.
3. El mandato negativo: No provocarlos a ira:
a. Contexto histórico. En aquellos tiempos los padres poseían la patria potestad, por el cual el padre podía disponer de la vida de los hijos de modo absoluto. Al nacer el niño era puesto a los pies del padre para que decidiera el destino de ese niño. Si lo aceptaba, lo levantaba del suelo y formaba parte de la familia. Si era rechazado, era puesto a las puertas de la casa done eran recogidos y puestos a disposición de abusadores, quienes lo podían esclavizar, dedicar a la prostitución.
b. ¿Cómo se puede provocar a ira?
i. El maltrato físico, el cual es cubierto como disciplina.
ii. El maltrato emocional. Por medio de la comparación, avergonzarlos delante de otros etc.
iii. La sobreprotección, donde los padres quieren determinar cada aspecto de la vida del hijo.
iv. El favoritismo de un hijo sobre otro. Es el caso de Jacob y José.
v. El perfeccionismo de los padres. Cuando los padres consideran que todo lo que el hijo realiza nunca está bien.
vi. La falta de reconocimiento, valoración y aceptación. Los hijos necesitan que los padres reconozcan el valor de hijo. Que los padres lo valoren por lo que son. Que los acepten tal como son.
vii. Cuando los padres manifiestan que los hijos son el estorbo en sus vidas. Es por los hijos quienes tiene que trabajar etc. Son vistos como si mejor no hubieren nacido.
viii. Es no permitirlos que crezcan al ritmo normal. Puede ser de dos maneras, mimándolo haciéndolo sentir que es un niño (aunque tenga 40 años) o exigirlos que se comporte como de cuarenta cuando tienen doce.
ix. Es mostrarle amor solo cuando los hijos agradan a los padres. Hace del ser amado resultado de la conducta.
4. El mandato positivo: Criarlos:
a. En la disciplina del Señor: Es el trabajo de discipular al hijo. Esto implica trasmitir vida, encaminarlos por un sendero de vida que Dios ha establecido para ellos.
b. Criarlos en la amonestación del Señor: Amonestar es poner en la mente de los niños las verdades de Dios. Y la mejor manera de hacer que los principios bíblicos queden grabados en la mente de los hijos es por medio del ejemplo de los padres. Los hijos aprenden mas por lo que ven que por lo que escuchan.

Papá ... yo quiero ser como tú[1]

Mi hijo nació hace pocos días, llegó a este mundo de una manera normal... Pero yo estaba de viaje ... ¡tenía tantos compromisos!

Mi hijo aprendió a comer cuando menos lo esperaba, y comenzó a hablar cuando yo no estaba... ¡Cómo crece mi hijo! ¡Cómo pasa el tiempo!

A medida que crecía, mi hijo me decía:

— ¿Papá, algún día seré como tú? ¿Cuándo vuelves a casa, papá?— No lo sé, hijo, pero cuando regrese, jugaremos juntos; ya lo verás.

Mi hijo cumplió diez años hace pocos días y me dijo:

— ¡Gracias por la pelota, papá!, ¿quieres jugar conmigo? — Hoy no hijo; tengo mucho que hacer.— Está bien papá, otro día será.

Otro día:- Papá tienes reunión en el Colegio.- ¿A qué hora?- a las seis...- Lástima: no puedo ir tengo una reunión. Cómo me gustaría asistir.Se fue sonriendo, siempre en sus labios las palabras: «Yo quiero ser como tú».

Mi hijo regresó de la Universidad el otro día, todo un hombre. — Hijo, estoy orgulloso de ti, siéntate y hablemos un poco.— Hoy no papá, tengo compromisos. Por favor, préstame el auto para visitar a algunos amigos.

Ahora ya estoy jubilado, y mi hijo vive en otro lugar. Hoy lo llamé:

— !Hola hijo, ¿cómo estás? ¡Me gustaría tanto verte! – le dije.— Me encantaría, padre, pero es que no tengo tiempo. Tú sabes, mi trabajo, los niños... !Pero gracias por llamar, fue increíble oír tu voz!

Al colgar el teléfono me di cuenta que mi hijo había llegado a ser como yo ...
Como Criar un Niño para Dios[2]
1. Pide a Dios por tu hijo antes de su nacimiento, y continúa pidiendo por él toda su vida. I Sam 1:11,27,28; Sal 71:6; Gál 1:15; II Tim 1:5
2. Examina tus expectativas para tu hijo. ¿Son realistas? Gén 33:12-14; I Cor 13:11; Mat 18:10
3. Amalo sin condiciones. Deuteronomio 7:7; I Juan 4:19; I Juan 4:10
4. Busca oportunidades para alabarle y felicitarle. Expresa tu aprecio hacia él a menudo Fil1:3; I Tes 1:2; II Tes 1:3
5. No le critiques antes de decirle sus puntos fuertes. I Corintnios 1:3-13
6. Dale la libertad para tomar decisiones donde no haya serias consecuencias. Tu meta es su madurez, no su dependencia total en ti. Prov 22:6; Col 1:27-28; Efe 4:13-15; 6:4
7. No lo compares con otros, especialmente con sus hermanos. Gál 6:4; II Cor 10:12,13; I Cor 12:4-11
8. No lo ridiculices. No lo menosprecies. No lo llames por nombres como tonto ni torpe. Mat 7:12; Efe 4:29,30; Col 4:6; Prov 12:18; 16:24
9. No lo corrijas enfrente de otros. Mateo 18:15
10. No hagas promesas ni amenazas que no puedas ni vayas a cumplir. Mat 5:37; Sant 5:12; Col 3:9
11. No tengas miedo a decir “no”, y cuando lo digas, sé firme. Gén 18:19; Prov 29:15; 22:15; I am 3:13; I Rey 1:6
12. Cuando tu hijo tiene problemas o es un problema, no sobre-reacciones ni pierdas control de ti mismo. No le grites. Efe 4:26,27; I Cor 16:14; II Tim 2:24,25
13. Comunica optimismo y esperanza. No comuniques por palabra ni acción que te has rendido al hecho de que tu hijo va a ser un fracaso. File 21; II Cor 9:1,2; I Cor 13:7
14. Asegúrate que tu hijo sabe perfectamente lo que esperas de él. Miq 6:8
15. Píde su consejo. Inclúyelo en algunas de las discusiones de las actividades de la familia. Rom 1:11,12; II Tim 4:11,12; Jn 6:5,6
16. Cuando te equivocas con tu hijo, confiésaselo y pídele perdón. Mat 5:23,24; Sant 5:16
17. Escucha algunas de las ideas de tu hijo en cuanto a vacaciones, quehaceres, problemas, disciplina, etc. Sal 128; Prov.18:13,17
18. Estudia las áreas de fuerza en tu hijo, y anímalo a desarrollarlas más. Empieza con una de las áreas. II Tim 4:5; I Ped 4:10
19. Dale mucho amor. Sé libre en la expresión de tu amor en palabras y actos. I Cor 13:1-8; 16:14; Jn 13:34,35; I Tes 2:7,8
20. Preocúpate más por las actitudes y el carácter de tu hijo que por su habilidad atlética, su ropa, belleza o inteligencia. I Sam 16:7, Gál 5:22,23; I Ped 3:4,5; Prov 4:23; Mat 23:25-28
21. Disfruta a tu hijo. Planea actividades con mucha diversión. Efe 6:4; Col 3:21; Ecle 3:4
22. Ayuda a tu hijo a aprender a ser responsable al disciplinarlo con justicia, consistencia, amor y rapidez. Prov 13:24; 19:18; 22:15; I Sam 3:13
23. Ve que la educación de los niños es un proceso que lleva/tarda muchos años. Efe 6:4; Prov 22:6; Gál 6:9; I Cor 15:58; Isa 28:9,10
24. Vive tus convicciones. Tus hijos aprenderán más observando tu vida que escuchando tus palabras Deut 6:4-9; I Tes 2:10-12; Fil 4:9; II Tim 1:5-7
25. Reconoce que es tu responsabilidad preparar a tu hijo para esta vida y la que sigue. Efe 6:4; Deut 6:4-9; Sal 78:5-7; II Tim 3:15-17
26. Sé sensible a las necesidades, sentimientos, temores y opiniones de tus hijos. Mat 18:10; Col 3:21
27. Trata a tu hijo en una manera que demuestre que él es importante y aceptado por ti. Mat 18:5,6
28. Evita palabras enojadas o exasperadas. Prov 15:1; Efe 4:31,32
29. Establece el hábito de leer la Biblia juntos. II Tim 3:15; Sal 78:5-8; 119:9-11
30. Escucha bien a tu hijo para que tu hijo querrá acercarse a ti con sus problemas y dificultades. Muestra un interés sincero en su mundo. Mantente disponible para tu hijo, aun cuando estés ocupado. Sant 1:19,20; 3:13-18; Fil 2:3,4
[1] http://www.anecdonet.com/modules.php?name=News&file=article&sid=106
[2] http://plsal.org/spanish/CLARKFUND/clark-fundamentos13.html. Fuente original: How to Grow a Child for God, por Wayne Mack