LA CAPACITACION
PARA EL SERVICIO MINISTERIAL
1.
Dado que Dios es quien nos ha dado
los dones que poseemos, Él ha determinado como debe ser el entrenamiento para
desarrollar y servir con eficacia con los dones que nos han sido dados NTV “Dios
trabaja de maneras diferentes, pero es el mismo Dios quien hace la obra en
todos nosotros” 1 Cor 12:6
2.
La capacitación del servidor se
inicia conociendo el poder de Dios, que es lo que nos da la capacidad de servir
como Dios desea NTV “También pido en oración que
entiendan la increíble grandeza del poder de Dios para nosotros, los que
creemos en él. Es el mismo gran poder 20 que levantó a Cristo de los muertos y lo sentó en el lugar de honor, a la
derecha de Dios, en los lugares celestiales” Efe 1:19-20
a.
El Señor, nuestro Dios y Padre,
hará con cada uno de nosotros como Él lo ha determinado, por esta razón trata a
uno de una manera y a otro, de otra manera NTV “No,
no digan eso. ¿Quién eres tú, simple ser humano, para discutir con Dios? ¿Acaso
el objeto creado puede preguntarle a su creador: «¿Por qué me has hecho así?»? 21 Cuando un alfarero hace vasijas de barro, ¿no tiene derecho a usar del
mismo trozo de barro para hacer una vasija de adorno y otra para arrojar
basura?” Rom 9:20-21
b.
Dios nos hace a cada uno de acuerdo
al propósito para el cual fuimos creados NTV “En
una casa de ricos, algunos utensilios son de oro y plata, y otros son de madera
y barro. Los utensilios costosos se usan en ocasiones especiales, mientras que
los baratos son para el uso diario. 21 Si te mantienes puro, serás un utensilio especial para uso honorable. Tu
vida será limpia, y estarás listo para que el Maestro te use en toda buena obra” 2 Tim 2:20-21
c.
Nuestra tarea: Reconocer que Dios
nos ha hecho tal como somos en el servicio NTV “Mientras
vivimos en este cuerpo terrenal, gemimos y suspiramos, pero no es que queramos
morir y deshacernos de este cuerpo que nos viste. Más bien, queremos ponernos
nuestro cuerpo nuevo para que este cuerpo que muere sea consumido por la vida. 5 Dios mismo nos ha preparado para esto, y como garantía nos ha dado su
Espíritu Santo” 2 Cor 5:4-6
3.
La obra de Dios. No es instantánea,
se requiere un largo proceso que comienza tratando con las motivaciones y
actitudes del corazón para luego ir entrenando en las acciones propias del
ministerio o servicio que se nos ha encomendado NTV “Cierto día, mientras Jesús caminaba por
la orilla del mar de Galilea, vio a dos hermanos —a Simón, también llamado
Pedro, y a Andrés— que echaban la red al agua, porque vivían de la pesca. 19 Jesús los llamó: «Vengan, síganme, ¡y yo les enseñaré cómo pescar personas!». 20 Y enseguida dejaron
las redes y lo siguieron” Mat 4:18-20
a.
Es un proceso donde Dios nunca se
cansa de enseñar la misma lección hasta que la aprendemos de la manera que Él
determina
b.
Por esta razón, tenemos que dejar
de pensar que las formas divinas se ajustan a nuestros criterios o tiempos
humanos, todo se debe hacer tal como el Señor lo determina NTV “Cuando
terminó de hablar, le dijo a Simón: —Ahora ve a las aguas más
profundas y echa tus redes para pescar. 5 —Maestro —respondió
Simón—, hemos trabajado mucho durante toda la noche y no hemos pescado nada;
pero si tú lo dices, echaré las redes nuevamente” Luc 5:4-5
c.
Otro aspecto vital en el
entrenamiento del Señor para desarrollar nuestra vida y ministerio es seguir la
dirección del Espíritu Santo “Porque todos los que son guiados por el
Espíritu de Dios, éstos son hijos de Dios” Rom 8:14
d.
En el trato de Dios, Él nos librará
de todo aquello que nos aleje del propósito para el cual nos llamó “¿Quién eres, señor?”, pregunté. Y el Señor contestó: “Yo
soy Jesús, a quien tú persigues. 16 Ahora, ¡levántate! Pues me aparecí ante ti para designarte como mi siervo y
testigo. Deberás contarle al mundo lo que has visto y lo que te mostraré en el
futuro.17 Y yo te rescataré de tu
propia gente y de los gentiles. Sí,
te envío a los gentiles,18 para que les abras los ojos, a fin de que pasen de la oscuridad a la luz, y
del poder de Satanás a Dios. Entonces recibirán el perdón de sus pecados y se
les dará un lugar entre el pueblo de Dios, el cual es apartado por la fe en mí” Hech 26:15-17
e.
El trato de Dios, en el proceso de
tiempo, cambia los valores y prioridades de los que sirven NTV “Antes creía que esas cosas eran valiosas, pero ahora considero que no
tienen ningún valor debido a lo que Cristo ha hecho. 8 Así es, todo lo demás no vale nada cuando se le compara con el infinito
valor de conocer a Cristo Jesús, mi Señor. Por amor a él, he desechado todo lo
demás y lo considero basura a fin de ganar a Cristo” Fil 3:7-8
4.
Ejemplo del trato de Dios. Pedro es
un ejemplo clásico del trato de Dios para hacer de nosotros, instrumentos
útiles para Su gloria
a.
Pedro el autosuficiente, que
pensaba que no era como los otros y que podía hasta morir por causa del Señor
NTV “Simón, Simón, Satanás ha pedido zarandear a cada uno de
ustedes como si fueran trigo; 32 pero yo he rogado en
oración por ti, Simón, para que tu fe no falle, de modo que cuando te
arrepientas y vuelvas a mí fortalezcas a tus hermanos». 33 Pedro
dijo: —Señor, estoy dispuesto a ir a prisión contigo y aun a morir contigo” Luc. 22:31-34
b.
Dios trato de una u otra manera a
Pedro para acabar con el orgullo que estaba detrás de su autosuficiencia
c.
Pedro, el que dependía de modo
total del Señor NTV “Mediante su divino poder,
Dios nos ha dado todo lo que necesitamos para llevar una vida de rectitud. Todo
esto lo recibimos al llegar a conocer a aquel que nos llamó por medio de su
maravillosa gloria y excelencia; 4 y debido a su gloria y excelencia, nos ha dado grandes y preciosas
promesas. Estas promesas hacen posible que ustedes participen de la naturaleza
divina y escapen de la corrupción del mundo, causada por los deseos humanos” 2 Ped 1:3-4
Conclusión: "DIOS
ES EL QUE EN VOSOTROS PRODUCE..." Fil 2:13
RV 60
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DHH
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NTV
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porque
Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena
voluntad.
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pues
Dios, según su bondadosa determinación, es quien hace nacer en ustedes los
buenos deseos y quien los ayuda a llevarlos a cabo
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Pues
Dios trabaja en ustedes y les da el deseo y el poder para que hagan lo que a
él le agrada.
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